En el mundo del diseño es muy importante saber dominar los colores y las tipografías. Solo con cambiar el tipo de fuente podemos transmitir una sensación y mensaje diferentes. Por tanto, si quieres convertirte en diseñador gráfico es necesario que conozcas las diferentes familias tipográficas y sus peculiaridades. Por ello, en este post te lo explicaremos en detalle. Además, si quieres ampliar tu formación académica y mejorar tus capacidades laborales, te recomendamos el Máster en Corrección de Estilo y Ortotipografía. ¡Síguenos!
Índice de contenidos
Qué son las familias tipográficas
En primer lugar, debes saber que las tipografías son los diferentes tipos de letras o estilos que se pueden elegir a la hora de diseñar o escribir un texto. Y es que nuestro alfabeto es un conjunto de caracteres que permiten la representación visual de nuestro lenguaje. Por este motivo, la tipografía toma gran relevancia en el sector del diseño.
Cada signo alfabético tiene unas características propias y los aspectos en común nos ayudan a reconocerlos e identificar el grupo al que pertenecen, que es lo que se conoce como familia tipográfica. Por tanto, estas familias son un conjunto de signos alfabéticos y no alfabéticos que comparten unas características estructurales y estilísticas.
Los signos alfabéticos son las letras mayúsculas y minúsculas, ambas tildadas también. Los signos no alfabéticos son los de puntuación y exclamación, así como los números.
Cómo escoger la mejor tipografía
Sabemos que hay una gran cantidad de tipografías para escoger. Pero a la hora de elegir una para tu trabajo debes tener en cuenta:
- Legibilidad. Es fundamental que la tipografía se entienda y se pueda leer.
- Definición. Has de tener muy claro para qué la utilizarás y qué quieres transmitir con ella.
- Experimentación. Prueba con diferentes tipografías antes de decidir cuál es la que más se adapta a tu idea.
- Abuso. Para evitar un desastre visual, puedes combinar fuentes, pero sin abusar.
4 familias tipográficas que debes conocer
Sí, existen muchas familias tipográficas. Algunas tienen siglos de historia mientras que otras son más recientes, ya que surgieron con los ordenadores y el diseño gráfico. Estas tienen diferentes clasificaciones según sus autores.
Aun así, aquí te ofrecemos una clasificación general, dividiéndose de la siguiente manera:
Serif o Romanas
Es la familia tipográfica más utilizada. Estas fuentes se identifican fácilmente por los peculiares remates que tienen las letras al final de las astas, conocidas como serifas. Son muy fáciles de leer gracias a sus proporciones y aspecto tradicional.
Si estás trabajando en el diseño de una revista, periódico o libro, estas tipografías son las más adecuadas para utilizar, ya que facilitan la lectura.
Sans Serif o Palo Seco
Están formadas por líneas rectas y círculos unidos. No tienen remates, son simples y funcionales. Como no tienen remates, tienen un toque más moderno y se pueden leer con facilidad.
El uso de estas tipografías se recomienda para proyectos con una estética actual. Además, como su aspecto es simple pueden combinarse con más facilidad.
Script o Rotuladas
También se conocen como caligráficas porque imitan la escritura a mano. Se utilizan para postales, invitaciones de boda o textos breves y cargados de expresión. También se usan mucho en el mundo de la publicidad.
Decorativas
El diseño de esta familia tipográfica es creativo y artístico, mezclando estilos y efectos tipográficos como el curvado, el moderno, el distorsionado, etc. Son poco legibles, por lo que se utilizan para fines ornamentales o en productos que requieren de innovación.